jueves, 4 de noviembre de 2010

Henry Miller, recuperò su libertad cuando abandonò su trabajo en el correro, y dijo cuantos años me deben esos malditos? por suerte si todo sale bien, a mi no me van a deber tantos años como a Henry. Pienso sobre esta nueva forma de esclavitud que es el trabajo y màs aùn de este tipo. En la puerta del archivo en donde trabajo, tengo una colecciòn de muebles de otra parte de la empresa, pero hay trazado entre ellos un camino que me saca de acà a respirar aire puro, el aire que respiro ahora està contaminado por el polvillo de los muebles esos. Estoy como Levrero en el Lugar, estoy en el momento en que las piezas que recorre empiezan a estar en ruinas, este lugar està en ruinas, sueño con la posibilidad de irme a otro lado. HOY ME LLEVO MIS PIEDRAS. les prometì que ivan a volver a un rìo en Cordoba, y les voy a cumplir, hoy se van a curar a mi casa, me han acompañado y llevado un poco de la mala energìa de este lugar estancado.
Creo que vendràn muchos dìas asì, para describirles esta realidad, creo que el espìritu que me acompañaba ya es libre, en realida no se como es esto pero me gusta fantasear con esa idea. y si es libre ese espìritu, empieza a ser libre el mìo.
Estuve encerrado acà por dos años y medio, me han querido postegar, posponer, guardar, archivar, pero eso llegò a su final...

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